Los incontrolables incendios en Los Ángeles, Estados Unidos, han dejado miles de estructuras destruidas y han obligado a cientos de familias a abandonar sus hogares. Entre los afectados por las evacuaciones está Ricardo Roldán Abellán, un costarricense de 41 años, oriundo de San Pedro de Montes de Oca, quien ha vivido los últimos tres años y medio en Pasadena, California, junto a su esposa, Gennelle Dedek.
“Aún estamos con evacuación nivel 2 por los incendios. Nos evacuaron el martes en la noche. Acá el fuego estuvo cerquísima de nuestra casa, pero no pasó a más por dicha”, comentó Ricardo, tras conversar con Teletica.com.
Aunque su hogar y barrio no sufrieron daños graves, a pesar de estar a tan solo cinco millas de la zona devastada, la situación ha sido crítica. “La cuadra al norte sí está con fuego y les fue bien feo. A partir de ahí, todas las casas están quemadas”, expresó.
La pareja, que recientemente remodeló su vivienda, adquirida en 2021, enfrentó momentos de gran estrés, especialmente debido a los fuertes vientos que alcanzaron entre 60 y 70 millas por hora, dificultando el control de las llamas.
“Nosotros volvimos de Costa Rica, de vacaciones, el pasado 26 de diciembre, y nunca imaginamos algo así. Esa noche (martes) no dormimos. Mi esposa estaba sola y tuvo que organizar toda la evacuación porque yo estaba en Chile por trabajo”, relató Roldán.
La experiencia de Ricardo evoca recuerdos de los terremotos de Limón y Puriscal, en Costa Rica, eventos que vivió cuando era niño.
“El sentimiento de no poder dormir por el miedo y la incertidumbre es algo que nunca había revivido hasta ahora. Para mi esposa Gennelle, a pesar de haber crecido en California y estar familiarizada con las alarmas de incendio, esta fue la primera vez que vivió una amenaza tan cercana en una zona residencial.
“A pesar de que no nos ha afectado directamente, tenemos un sentimiento de agradecimiento por la suerte que hemos tenido, pero también de luto por las personas afectadas tan cercanas a nosotros”, dijo Roldán.
La comunidad de Pasadena intenta regresar a la normalidad, pero para muchos, el impacto emocional de los incendios será duradero. Mientras tanto, Ricardo y su esposa continúan procesando lo ocurrido y solidarizándose con quienes han perdido todo en esta tragedia.
Hay barrios enteros devorados por el fuego y miles de hogares destruidos en uno de los peores desastres que haya golpeado California, con una estimación de pérdidas que podría alcanzar los $150.000 millones de dólares, según AccuWeather, una empresa de medios de comunicación estadounidense del sector privado.